Las estructuras que encontrarás son de pequeñas dimensiones, pero quienes las administran tienen un corazón grande y te harán sentir como en casa.
Los refugios cuentan con cupos limitados, pero gracias a esto puedes conocer a otras personas y entablar nuevas relaciones. No en todos encontrarás agua caliente o las comodidades de la ciudad, pero seguramente en todos gozarás una óptima atmósfera.
Los refugios cuentan con puestos limitados (en algunos casos solo 12). Reservar tu cupo garantiza tu alojamiento y ayuda a quién gestiona el refugio para ofrecerte el mejor servicio posible.
El gestor del refugio es como un padre de familia, si con el atardecer no llegas él se preocupará. Anula la reserva si decides cambiar de programa o avisa en caso de imprevistos.
¡En la montaña no pasa el camión de la basura! Ayuda al gestor del refugio a mantener limpio y en orden el entorno, llevando a casa tu basura o la que encuentres durante el itinerario
En los refugios no existen habitaciones individuales o dobles, seguramente tendrás que compartir tu habitación con otras personas. Te conviene aprovechar el momento de la cena para entablar relaciones.
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A pesar de que cada refugio hace lo posible para aprovechar las energías renovables y fossil-free, esto no da la posibilidad de mantener las alimentos o comodidades que implican un gran consumo de recursos. Recuerda también que lo que encuentras en un refugio no llega del supermercado de la esquina, sino que generalmente llega a través del teleférico o en la espalda del gestor del refugio.
